
A ti, que eres
blanca como las nubes, de cabello negro azabache, con una sonrisa pura en un
rostro perfectamente armónico. Algunas
pecas cerca de unos ojos marrones que configuran una mirada sobria e
intrigante.
Tu
indiferencia trastoca mi homeostasis sentimental, mendigo un instante de tu
atención. Simplemente te alejas mientras
que yo estoy dispuesto a entregarle mi libertad, mi rebeldía y hasta mi fe.
Cuando estoy
cerca de ti no puedo ocultar mi interés.
Sin embargo, como dice el francés, yo quisiera que el “Le Premier Pas”
fuera tuyo, aunque puedo jurar que eso jamás pasara. No me atrevo a nada,
quisiera que me tomaras del brazo y me llevaras por las escaleras de tu vida a
los rincones de tu alma, donde yo
viviría felizmente realizado.
En las noches
me siento a pensarte y concluyo que soy un idiota, que sé que nunca te diré
todo lo que realmente siento, pero debo intentar descifrar el ritmo de tu
corazón, alejar tus demonios y tomarte
para siempre. Si soy Bolívar es porque tú eres y serás por siempre mi campaña
admirable.
Tomás Chitty
No hay comentarios.:
Publicar un comentario